En los últimos años la pocería sin zanja está en auge, y es una técnica cada vez más demandada, pero desconocida para la gran mayoría. Por ello en este post vamos a contar qué es la pocería sin zanja y para qué sirve.
¿Qué es la pocería sin zanja?
La pocería sin zanja es una técnica que permite habilitar o realizar reparaciones de tuberías, alcantarillas, acueductos, etc., sin que sea necesario abrir una zanja ni romper el pavimento para ello, ni tampoco realizar obras de gran envergadura. Esto es posible gracias a que se realiza desde los pozos o arquetas ya existentes.Se trata de una técnica que destaca por su elevada precisión, en la que, utilizando la tecnología correcta, permite crear una nueva tubería en el interior de la tubería ya existente, que estará al 100% de su capacidad estructural.
Dada su complejidad y el uso de tecnologías específicas, la pocería sin zanja debe realizarse mediante profesionales expertos y con experiencia, ya que de lo contrario los resultados dejarán mucho que desear, y además aumentarían los riesgos.
Entre las diferentes opciones disponibles, GSC, destaca como una de las mejores empresas especializadas en este tipo de trabajos, con más de 20 años de experiencia, y destacando por ser una empresa pionera en la introducción de las tecnologías sin zanja para rehabilitaciones de las redes de mantenimiento de las ciudades en nuestro país. En su web puedes conocer todos los servicios que ofrece.
¿Para qué sirve y cómo funciona la pocería sin zanja?
Como hemos comentado, la pocería sin zanja es una técnica destinada a reparar y habilitar tuberías sin tener que hacer una zanja, lo que la convierte en la mejor solución para problemas de este tipo.Para ello, se introduce una manga de fibra de vidrio impregnada de resina de poliéster fotosensible en la tubería que se va a reparar, y después esta se infla utilizando aire comprimido. Hecho esto, se aplica calor (luz LED o UVA) para endurecerla y construir una nueva tubería dentro de la misma.
La aplicación del calor puede realizarse mediante luz LED o rayos ultravioleta. Los rayos UVA se aplican para reparar tuberías de grandes longitudes y dimensiones, ya que resulta más rápido, cómodo y limpio; y la luz LED, más indicada para tuberías de diámetros más pequeños, como las de nuestros hogares y empresas.
Es importante destacar que todo este proceso se realiza sin necesidad de abrir zanjas ni hacer obras.
Por otro lado, para la pocería sin zanja es necesario utilizar una tecnología específica, de ahí que la especialización y la experiencia sean indispensables.
Entre las herramientas más utilizadas destaca el robot fresador, que se usa para solucionar averías por obstaculización, que son la causa de los atascos que se dan en las tuberías. El robot fresador permite acabar con el material que impide que la tubería funcione correctamente, restableciendo su capacidad hidráulica y su funcionalidad.
Otro equipo muy utilizado es la cámara CCTV para analizar y revisar el estado de la tubería desde el interior, lo que resulta muy útil para detectar una avería. Este tipo de cámaras muestran unas imágenes de alta calidad que permiten conocer con total exactitud lo que hay que arreglar y donde.
Como verás, la pocería sin zanja es la técnica más eficaz y demandada para la reparación de tuberías de la red de saneamiento.
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