Nadie quiere estudiar arquitectura, por lo menos en España. Al menos eso es lo que reflejan las últimas notas de corte de las diferentes universidades en las que se imparte el Grado en Arquitectura.
Recordemos que la nota de corte indica la nota de selectividad con la que entra el último estudiante hasta completar las plazas totales ofertadas.
Es decir, que si la nota de corte es de un 5, la mínima posible, quiere decir que han entrado todos aquellos que han solicitado plaza.
Las notas de corte en arquitectura vienen bajando desde el 2009 como ya vimos hace tiempo en este post. Sin embargo nunca han estado tan bajas como en este curso 2016-2017.
Vamos a hacer un repaso por las notas de corte de las distintas Universidades Públicas de España en las que se imparte arquitectura. Los datos los hemos obtenido de esta web.
Notas de corte de Arquitectura (2016-2017)
A Coruña Castilla la Mancha Girona Granada Gran Canaria Málaga Sevilla Cartagena Madrid Alcalá de Henares Alicante Valencia Rey Juan Carlos (Madrid) Valladolid País Vasco Zaragoza Sant Cugat del Vallés Barcelona Tarragona | 5,18 7,97 5,00 5,45 5,00 7,28 5,00 8,69 9,80 5,26 5,00 5,00 8,40 5,00 5,00 7,49 8,95 5,98 5,00 |
Hay que recordar que la nota de corte actualmente se barema sobre 14, no sobre 10 como se hacía antes. Es decir, cuando vemos notas por encima de 7 puntos, como en el caso de Madrid o Barcelona, en realidad si vemos el dato baremado sobre 10 es bastante menor. Por ejemplo:
Baremado sobre 10:
Castilla la Mancha Málaga Cartagena Madrid Sant Cugat del Vallés | (7,97) 5,69 (7,28) 5,20 (8,69) 6,20 (9,8) 7,00 (8,95) 6.39 |
Cada vez menos gente estudia arquitectura
La primera conclusión que podemos obtener de estos datos es que la demanda de la carrera de arquitectura ha bajado mucho.Tradicionalmente era una carrera en la que no era particularmente fácil entrar, quizás no ostentaba las notas de corte más alta, pero sin duda había que tener cierto nivel para entrar en las principales universidades. Casi siempre por encima del 7 (sobre 10).
Esta bajada de demanda indica que los nuevos estudiantes de arquitectura conocen, o al menos intuyen, la realidad laboral de la profesión. Lo cual es positivo.
No se trata de ahuyentar a los alumnos de arquitectura, pero sí al menos que los que eligen esta carrera conozcan la realidad. Este hecho contrasta con la apreciación de nuestros seguidores en twitter, a los que preguntamos sobre el tema.
Bajada del nivel académico
Esto es un problema muy grave y a la vez tremendamente complejo. Cuando la nota de corte se va hasta el 5, el nivel académico medio del alumnado es más bajo.Las consecuencias que esto conlleva para la carrera y para la profesión son tan variables como desconocidas. Por ejemplo:
- ¿Se formará un atasco en las carreras?
- ¿Bajará el nivel exigido a los estudiantes de arquitectura?
- ¿Tendremos arquitectos de menor nivel?
- ¿Tiene que ver la nota con la que entra un alumno con su rendimiento?
El tema es amplio y daría para un debate interesante.
La carrera peligra en las universidades públicas
Si los centros no son capaces de llenar su oferta de plazas, la primera consecuencia es que habrá menos matriculas. Matriculas que financian en parte el sistema universitario: Sueldos de profesores, instalaciones, material,…Como en el punto anterior, este problema provoca muchas consecuencias que da lugar a otras tantas preguntas:
- ¿Cómo solucionar el problema de las aulas vacías?
- ¿Habría que limitar las plazas y contraer el parque universitario?
- ¿Ceder parte de las instalaciones a otros usos?
- ¿Habría que subir el precio de la matrícula?
- ¿Habría que bajar el precio de la matrícula?
- ¿Debería ser gratis la universidad como en otros países de Europa?
Disminuir las plazas ofertadas de arquitectura es uno de los debates más calientes sobre el tema. Los defensores de esta medida alegan que se llenaría el cupo de matrículas, lo que haría el sistema más sostenible.
Subiría el nivel académico del alumnado, tendríamos mejores profesionales y bajaría el número de arquitectos que se licencian al año a un número que el tejido laboral pueda absorber.
Arquitectura se vuelve más vocacional (aún)
Este punto quizás es más discutible porque la vocacionalidad de una carrera es bastante difícil de medir. Por eso hemos dejado esta conclusión para el final, ya que es una apreciación bastante subjetiva.Se puede entender que el que decide estudiar arquitectura hoy es porque realmente tiene un interés especial por la arquitectura.
Los perfiles más técnicos se derivan más hacia las ingenierías, que por cierto si han mantenido sus notas de corte estables, incluso han aumentado.
El que se mete a estudiar arquitectura lo hace a pesar de tener un panorama laboral desalentador. Ya nadie estudia arquitectura porque sea una carrera "con salidas".
***
Esta es nuestra lectura sobre el tema. Es un tema polémico, lo sabemos, pero creemos que el debate es necesario y queremos escuchar y dar voz a todas las visiones sobre el tema. Si tienes tu propia visión te animamos a que nos la cuentes en los comentarios. Gracias por leernos.
CURSOS Y MASTERS PARA ARQUITECTOS
Si estás interesado en Cursos o Másteres, échale un vistazo a nuestra selección de programas de formación específicos para arquitectos.VER TODOS LOS CURSOSTal vez te interese:
Ya soy arquitecto ¿Y ahora qué hago?
Ser arquitecta en Europa: Salarios más bajos y consideración profesional